El cristal es un elemento cada vez más importante para conseguir un diseño interior exclusivo a la hora de realizar un reforma de nuestra vivienda.
El Cristal comienza a tomar una especial relevancia dentro de los materiales de construcción.
No solo como elemento decorativo sino también como elemento diferenciador de espacios y zonas de uso de las viviendas.
Igualmente en los espacios laborales, lleva décadas ganando terreno a otros materiales como la madera en la función de la compartimentación o decisión de espacios, así como en el uso como mesas de trabajo.
Sus avances para estar integrado con otros elementos de construcción, han multiplicado de forma exponencial las terminaciones, tantas como gustos o preferencias de las personas que eligen este material.
Su uso va mucho más allá de la utilización en ventanas, también está presente en aseos, pero no de forma exclusiva, ya que en barandillas o divisorias, es también común verlos en la actualidad.
Beneficios del uso del cristal como elemento constructivo
Existen diferentes usos para el vidrio o cristal en la planificación e una reforma integral.
Los principales beneficios a la hora de utilizar el cristal en nuestras viviendas son:
- Luminosidad: Con él, aprovecharemos la luz que entra por las ventanas, lo que supondrá un menor consumo de energía eléctrica.
- Separador de estancias o muro: Podemos aprovecharlo cómo elemento integrado en la construcción, separando distintas zonas de uso, pero aprovechando la luz natural, además no tendrán por qué ser solo cristal, este elemento se podrá instalar con otros elementos constructivos cómo madera, aluminio, etc., consiguiendo de esta forma un elemento decorativo de gran belleza. Ni qué decir tiene que en aquellas viviendas con vistas exteriores se convierte en un perfecto aliado para aprovechar y disfrutar al máximo de las mismas.
- Adaptabilidad: Su poder camaleónico, le hace ser un comodín perfecto para cualquier tipo de decoración, independientemente del estilo de nuestra vivienda. El cristal se podrá adaptar e integrar al entorno sin ningún tipo de problema, no importa el estilo, se va a integrar perfectamente.
- Universalidad: Su instalación es posible en cualquier estancia de la vivienda. Antiguamente, se instalaba principalmente en salones y cocinas, pero hoy en día es un elemento habitual decorativo y funcional, para cualquier habitación, ya sea baño, dormitorio, recibidor, vestidor, etc.
Acabamos de ver qué son múltiples los beneficios de su uso en un replanteamiento de las estancias de una vivienda, en proceso de reforma, para combinar diseño y luminosidad entre otros.
Destaca cómo última tendencia, la utilización en las reformas integrales, de suelos de cristal
Por todo ello el Cristal cada vez más se utiliza como elemento constructivo en combinación de otros elementos para conseguir entornos únicos y exclusivos a la par que prácticos y eficientes.
Decorar con Cristal, una tendencia al alza
También es importante la funcionalidad de los mismos, ya que no siempre se necesita que la transparencia se a total y necesitamos claridad pero sin visibilidad.
Dependiendo de la luz que dejan pasar a través de ellos, los cristales se pueden clasificar en:
- Transparentes, dejan pasar el cien por cien de la luz.
- Translucidos, dejan pasar parte de la luz, teniendo la posibilidad de regular según sus características la intensidad de la misma.
- Opacos, no dejan pasar la luz.
Otro aspecto fundamental del material es su terminación, y gracias a los avances tecnológicos, cada vez tenemos una mayor variedad de acabados.
No es lo mismo el tipo de uso en el interior de una cocina que en un aseo, y ni que decir tiene en las ventanas o cerramientos de nuestra vivienda reformada.
Respecto a su terminación los cristales los podemos clasificar como:
- Laminados: Compuestos por dos o más vidrios unidos por una lámina de butiral de polivinilo (PVB), para aumentar su seguridad en caso de rotura.
- Templados: Se fabrican a temperaturas de más de 600 °C y se tratan con productos químicos, se consiguen cristales de gran resistencia.
- Serigrafiados: Cristales de incrustación de pintura vitrificable para así conseguir los diseños que queramos.
- Esmerilado: Conocido también como opacado, se pule y deslustra con esmeril dejando un efecto translucido, permite el paso de la luz pero no deja ver a través de él.
- Pulidos, se utiliza el pulido para quitar arañazos o desperfectos, dejando completamente lisa y brillante la superficie.
- Perforados, son cristales que tienen perforaciones ampliando aún más su capacidad decorativa.
Es muy recomendable que cuando estemos pensando en la decoración de nuestro hogar como paso posterior a una reforma, dediquemos un poco de tiempo a descubrir las enormes posibilidades que nos ofrece la instalación del cristal cómo elemento decorativo.
Una tendencia sin lugar a duda en auge, con continuos avances técnicos y que va a dejar volar nuestros gustos e imaginación hasta límites insospechados.
En Godai hacemos reformas integrales y adaptamos los materiales de construcción modernos, a los diferentes acabados que consensuamos con nuestros clientes, en el proceso de diseño de la misma.